Descripción
“La adolescencia es una etapa conflictiva, llena de cambios tanto a nivel biológico como psicológico y social, e igual de difícil para los padres que para los hijos. Los adolescentes lo cuestionan todo, y si viene de sus padres, de su familia, mucho más.Comienzan a mostrar una creciente independencia de la familia y un mayor interés en los amigos: necesitan y buscan personas con quienes identificarse, que estén pasando por lo mismo que ellos. El adolescente necesita más que nunca que a su alrededor todo sea sólido y estable: en su círculo de amigos también en el hogar. Ningún padre puede vivir sin aprensión esos momentos, pero para madurar el niño necesita escapar del control paterno. Cambia tu actitud ante el adolescente. Mientras no te controles, cualquier esfuerzo por razonar con él será en vano. No se llega a ningún sitio con gritos y palabrería. Tú debes ser el primero en dar ejemplar y demostrarle que eres capaz de mantenerte tranquilo en situaciones de tensión y de estrés. Perder el control destroza la posibilidad de seguir dialogando para resolver el conflicto. En esta segunda entrega de “Si quieres educar al hijo, educa al padre” (preadolescencia y juventud) propongo técnicas que te ayudarán a vincularte mejor con tu hijo adolescente, a lograr una mejor comunicación, una convivencia más armónica en el hogar, y verás que con el tiempo se irá formando un adulto digno y feliz.” T.K.